Empatizar consiste en una estrategia dirigida a intentar entender el porqué de las opiniones y formas de actuar de otras personas, mostrando interés por ello, pero no con la intención de agradar al otro o de crear complicidad. Empatizar es dotarme de conocimiento de lo que condiciona la opinión y actuación del otro para que me ayude a interactuar con él en aquello que sea oportuno.
La empatía me ayuda a reducir el riesgo de gap en mi interpretación del otro y, por lo tanto, permite que mi actuación sea más coherente de lo que sería si no dispusiera de ese conocimiento. Además, me lleva a aceptar y a asumir que las realidades que otros perciben pueden ser diferentes a las mías. Eso es un gran avance. No muchos de los que dicen que hacen esto, lo hacen realmente.
Pero la empatía no es suficiente. Necesito ser capaz de interpretar y, en el caso de que deba intervenir, debo ser capaz de aportar al otro el criterio necesario para que ajuste su interpretación. Si consigo esto, eliminaré no pocos riesgos, no pocas consecuencias derivadas de la frase que párrafos atrás, destaca en solitario: Actuamos según nuestra `verdad´ aunque pueda estar equivocada.